
Habia una vez...
El señor Rodriguez sale de su casa como todas las mañanas.
Camina con su abrigo largo y cafe, su maletin, y su paraguas, apesar de que el noticiero ah indicado que no lloveria en dias y el sol brilla con todo su esplendor.
Se detiene por un cafe como acostumbra, ordena su café americano como de costumbre y se lo bebe de un sorbo.
Ve a un niño sentado en una banca del parque por el que tiene que atravezar y sigue su camino. El niño lo ve y corriendo se situa enfrente de el
-Disculpa señor
-Si?
-Es cierto lo que dicen que Arbol que nace torcido jamas su rama endereza?
-Pues, si, es cierto hijo
El niño baja la cabeza y se va descepcionado.
El señor lo alcanza - ¿por que preguntas hijo?
- Pues vera señor, hay un arbolito aqui en el parque que me gusta mucho, es pequeño, pero ya esta torcido
El niño lleva al señor a ver el arbolito que resultó ser un rosal pequeño
El señor sonrie y le explica al niño que ese no es un arbol, y que no le va a pasar nada por haber nacido torcido, pues de grande hiba a dar hermosas flores.
El niño sonrie, le da las gracias al señor y se va corriendo a travez del parque.
El señor Rodriguez también sonrie y piensa que esa explicación resultó mas entretenida que explicarle el refran en si.
Muy bien. De una manera simple describes las acciones del personaje en presente actual.
ResponderEliminarmuy buen trabajo
ResponderEliminar¿y en donde esta lo aburrido?
ResponderEliminarme gusta ..... :D
ResponderEliminarMega like =D
ResponderEliminarexcelente reflexiòn del señor , la verdad me gustò mucho y tiene una buen mensaje
ResponderEliminarQué bonito. Me ha gustado bastante.
ResponderEliminarTe encontré de nuevo. Y pensé que ya no escribías. Me has alegrado la madrugada de veras.
Un abrazo fuerte.